La alergia a los animales domésticos es muy frecuente entre los adultos, siendo el doble de pacientes alérgicos a los gatos que a los perros.
Qué provoca la alergia a los gatos
Las respuestas alérgicas se producen por una respuesta exagerada del sistema inmune a un antígeno. El sistema inmunológico es el encargado de eliminar agentes extraños como virus, bacterias, parásitos. Cuando esta respuesta es hipersensible se producen picores, inflamación, enrojecimiento o sarpullidos.
En el caso de los animales domésticos, las personas alérgicas reaccionan de manera exagerada a las proteínas inocuas de la saliva, orina, secreciones de las glándulas sebáceas o caspa.
No es el pelo lo que produce la alergia, aunque ayuda a que se acumule caspa y otros alérgenos como el polvo. Los gatos se acicalan frecuentemente, distribuyendo esos alérgenos por todo su cuerpo. Además al moverse por las superficies, depositarán alérgenos en alfombras, moquetas y ropa.